Las piscinas inteligentes o Smart Pool nos permiten establecer procesos automatizados que nos permiten tener la piscina más controlada y cuidada sin la necesidad de gastar tanto tiempo.
Para tener este tipo de piscina debemos centrarnos en una serie de elementos:
Conexión WiFi
Una piscina conectada nos ayuda a controlar lo que allí ocurre en cada momento y nos permite tener la tranquilidad de tener nuestra piscina bajo control incluso de forma remota. Además, esta tecnología permite aprovechar de forma más eficiente el consumo energético de todos los sistemas integrados en ella, para conseguir importantes ahorros en productos para mantenimiento, consultar asesoramiento de expertos, programar el funcionamiento o parada de bombas, iluminación subacuática, bombas de calor. etc.
Por tanto, el Internet Pool ya es una realidad que nos permite acceder a nuestros sistemas de jardín y piscina de forma rápida y sencilla.
Cloración salina inteligente
El equipo de cloración salina que ha sido diseñado como un objeto inteligente, nos permite una configuración digital personalizada y facilita la comunicación entre diferentes dispositivos, como bombas de calor o sistemas de iluminación.
Estos dispositivos hacen que el control de todos los elementos de la piscina y el jardín sea fácil e intuitivo. Estos equipos de electrólisis salina también se distinguen por sus funciones de control personalizado, es decir que es posible adaptar y personalizar el equipo integrando diferentes funciones.
Lecturas a tiempo real
Los analizadores de piscinas inteligentes nos permiten registrar valores exactos de la calidad del agua e integrar la conectividad con los teléfonos inteligentes a través de una aplicación. Mantener la calidad del agua de la piscina es muy importante para disfrutar de un baño agradable y relajante.
El grado de fiabilidad es muy alto. En primer lugar, mediante el uso de sensores muy sofisticados que ofrecen una lectura precisa de aspectos como el pH o la salinidad.
En segundo lugar, porque en el propio diseño incorpora conectividad. A través de una aplicación, la calidad del agua se puede monitorear en tiempo real. Los sensores del analizador inteligente envían notificaciones a la aplicación, mostrando el porcentaje exacto de productos químicos que la piscina necesita en todo momento, ahorrando tiempo y dinero.